viernes, 7 de diciembre de 2012

Transgénicos en tu plato










Desde épocas casi "inmemoriales" existe un gran debate sobre el uso o no de los alimentos transgénicos, pero realmente sabemos ¿qué son los Organismos Genéticamente Modificados (OGM)?, ¿qué riesgos pueden producir éstos? y ¿qué intereses hay detrás de ellos?.





Por un lado, se encuentran las empresas productoras de semillas modificadas como Monsanto o DuPont, que aseguran la inocuidad  de sus productos y alaban las bondades de sus semillas; los gobiernos, que presionados por determinados lobbies, deciden a espaldas del populacho si nos convienen o no y por último las compañías activistas en la defensa del medio ambiente como Greenpeace o Amigos de la Tierra que se oponen ferozmente a la utilización de estos OGM's.
Pero, ¿Qué argumentos tiene cada uno para defenderlos?.

Entre las empresas suministradoras de semillas transgénicas, se destaca a Monsanto como uno de los mayores productores. Monsanto es una multinacional americana fundada en San Luis, Misuri, en 1901 por John Francis Queeny, un químico que soñaba con fabricar sacarina y hacer la competencia a Alemania, por aquellos tiempos, la única que lo fabricaba. Al inicio, fabricaba sacarina y era uno de los principales proveedores de Coca-Cola, también se dedicó a lo largo de los años a fabricar plásticos y ácido sulfúrico. La empresa siguió expandiendose y llegó a adquirir G.D. Searle & Company en 1985, que fabricaba aspartame. También Monsanto sintetizó la hormona somatotropina bovina, desarrolló un herbicida total llamado RoundUp (glifosato) y comenzó a modificar la base genética de determinados cultivos, principal actividad en la actualidad.

¿ Cual es su versión?

Monsanto asegura la total seguridad de sus semillas modificadas. ¿En qué consiste esa modificación?.
El maíz y otros muchos cultivos son atacados frecuentemente por plagas, como Sesamia nonagrioides o Ostrinia nubilalis (barrenadores del tallo), y Monsanto descubrió que una bacteria era capaz de detener el avance de esta plaga al producir una toxina. De esta forma, se incluyó el gen que producía esta toxina (toxina Bt) en el ADN del maíz y cuando las larvas de los insectos intentaban alimentarse de la hoja o del tallo del maíz morían.
También desarrolló un potente herbicida cuyo principio activo es el glifosato y comercialmente se llama RoundUp. Este herbicida es capaz de acabar con todo vegetal que no haya sido tratado genéticamente con la bacteria Agrobacterium CP4 que es resistente al glifosato. De esta forma, el herbicida es selectivo a la hora de eliminar la cubierta vegetal.

La compañía asegura que todos sus productos han pasado por los controles más rigurosos de los estados y puede asegurar su inocuidad para el consumo humano, además indica que cientos de miles de comidas con OGM han sido consumidas y no se ha presentado ni un caso de enfermedad relacionada con los OMG's. Además aseguran que sus cultivos modificados son más ecológicos porque necesitan menos cantidad de pesticidas que los tradicionales.

España es el país de Europa más favorable a los transgénicos ya que cultiva el 80% de todo el maíz transgénico de la Unión Europea en 2009. Además el 22% del maíz sembrado en España esta modificado genéticamente. En la infografía inferior se aprecia la evolución de los cultivos en España durante los últimos 15 años, los cultivos modificados y una comparativa mundial.






En los últimos años, Europa se ha mostrado cada vez más reticente a la implantación de cultivos modificados mientras que España se ha convertido en el bastión de los cultivos transgénicos en Europa.
Compañías, como la multinacional alemana Basf, han trasladado la mayor parte de sus investigaciones a EE.UU. y America del Sur por la falta de aceptación y su baja demanda y aunque sus productos están avalados por organismos tan prestigiosos como la OMS, los europeos consideran que los organismos genéticamente modificados no ofrecen beneficios y son inseguros.

En España, la apuesta por los cultivos transgénicos es fuerte, tanto que el Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente asegura que "el maíz transgénico es más ecológico que el convencional", ese mismo maíz que está vetado en Francia y Alemania y que ahora estos países no permiten exportar a sus mercados. España se encuentra con el problema añadido de no poder sacar a la venta estas grandes cantidades de maíz modificado y de poner en gran aprieto a los cultivos ecológicos por la contaminación cruzada que se puede producir. Esta presión que sufre España esta recogida en las revelaciones que hizo Wikileaks, en las que se observan las artimañas de EE.UU. para convencer a España para que Bruselas desregularice los cultivos transgénicos.

El ejecutivo español asegura que "El maíz MON810 ha resultado ser una solución en la lucha contra la plaga del taladro para muchos agricultores de amplias regiones españolas como la del Valle del Ebro. El cultivo de este maíz ha permitido ahorrar a los agricultores muchos litros de insecticidas y pasadas de tractor".
La defensa del Estado español de los trasgénicos esta avalada por la EFSA (aquí) y por multitud de científicos que no logran encontrar problemas sanitarios derivados del consumo de OMG, "no es probable que el cultivo de Bt11 y de MON810 conlleve riesgos distintos del cultivo del maíz equivalente y convencional" (EFSA) dijo en su momento Miguel Arias Cañete, Ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.




Ensayos experimentales en España (2010). Fuente:gastronomiaycia.com


Greenpeace y Amigos de la Tierra, entre otras ONG's ecologistas, han luchado fuertemente contra la utilización de especies geneticamente modificadas.
Sus argumentos son:


  1. Contaminación del suelo: Las raíces del maíz modificado Bt liberan la toxina Bt al suelo y se sabe que esta toxina se une a ciertos componentes del suelo, donde puede permanecer por más de 200 días, protegida de la degradación y manteniendo su capacidad de eliminar las larvas de algunos insectos (Saxena et al., 1999).
  2. Contaminación genética: los cultivos transgénicos pueden transferir su modificación genética a los cultivos convencionales o a los ecológicos, lo cual plantea serias dudas sobre la viabilidad de una coexistencia entre una agricultura biotecnológica y una agricultura tradicional. Esta contaminación puede proceder de de polinizaciones cruzadas entre distintos cultivos, contaminaciones de cultivos previos o pérdidas de semillas durante el transporte en camiones, barcos,etc.
  3. Aparición de resistencias: los parásitos pueden desarrollar resistencias haciendo que la toxina sea ineficaz.
  4. Desaparición de biodiversidad: debido a las toxinas liberadas y que pueden afectar a otros organismos, la contaminación genética y por el uso de componentes químicos no selectivos.
  5. Rotura de la barrera de las especies: la inclusión del gen de una bacteria en una planta.
  6. Aparición de alergias, resistencias a antibióticos, contaminación de alimentos por el uso de más químicos,etc.

Además de todos estos hay más motivos como sociológicos, económicos, éticos,etc.




Acción ecologista en un campo de maíz transgénico


Y nosotros ¿Qué decimos?

El consumidor tiene derecho a saber que consume, independientemente de si son alimentos totalmente inocuos o presentan serias dudas. Por eso la nueva regulación comunitaria sobre alimentos y piensos modificados genéticamente, así como la que regula la trazabilidad y el etiquetado de organismos modificados genéticamente (OMG), fueron publicadas conjuntamente el 18 de octubre de 2003 en el Diario Oficial de la UE.
Esta regularización obliga del etiquetado a los alimentos que contengan o estén compuestos de OMG siempre y cuando superen el 0,9% de los ingredientes del alimento considerados individualmente o de los alimentos consistentes en un solo ingrediente, y su presencia sea accidental o inevitable (circunstancias éstas que en caso de requerimiento por la autoridad competente, el operador ha de poder demostrar que ha adoptado las medidas apropiadas para evitar la presencia accidental o inevitable de dicho material).
Aunque la UE ha demostrado el liderazgo de la campaña sobre etiquetado de transgénicos en el mundo, su nivel de tolerancia para eximir de la obligación a etiquetar a los diferentes operadores económicos se considera aún demasiado alto por determinados sectores que consideran que si tecnológicamente se podría llegar a detectar como valor el 0,1% de OMG, cualquier material transgénico detectable debería ser etiquetado. 

El etiquetado de los alimentos, de contener ese 0,9% más de OMG, deberían indicar después de los ingredientes el texto: «modificado genéticamente» o «producido a partir de [(nombre del ingrediente] modificado genéticamente».
Paralelamente, las organizaciones no gubernamentales como Greenpeace han sacado a la luz una lista de alimentos con procedencia total o parcialmente de OMG's. Esta lista se llama Guía Roja y Verde de los alimentos transgénicos donde se incluyen los productos cuyos fabricantes han asegurado a Greenpeace que no utilizan transgénicos (Verde) y los productos que no pueden ser garantizados de contener transgénicos (Rojo).






Véase:
http://www.monsanto.com/newsviews/Pages/food-safety.aspx
http://www.monsanto.com/newsviews/Pages/food-labeling.aspx
http://www.monsanto.com/newsviews/Pages/food-safety-science.aspx
http://www.tierra.org/spip/IMG/pdf/transgenicos-una-amenaza-para.pdf
http://www.tierra.org/spip/IMG/pdf/costes_ocultos_OGMs.pdf
http://www.tierra.org/spip/IMG/pdf/OMG_salud_RVSP.pdf
http://www.tierra.org/spip/IMG/pdf/Critica_opinion_EFSA_MON810_es.pdf
http://www.greenpeace.org/espana/es/Trabajamos-en/Transgenicos/En-nuestros-platos/Guia-roja-y-verde-de-alimentos-transgenicos/
http://www.elmundo.es/elmundosalud/2004/04/19/dieta/1082357695.html
http://sociedad.elpais.com/sociedad/2012/06/25/actualidad/1340649867_357787.html

http://www.elpais.com/articulo/espana/EE/UU/Espana/nos/pide/presionemos/Bruselas/favor/transgenicos/elpepuesp/20101218elpepunac_12/Tes
http://www.gastronomiaycia.com/2008/05/10/semillas-transgenicas-sus-problemas-y-consecuencias/
http://www.gmo-safety.eu/news/1417.genetic-engineering-maize-mon810-efsa-cultivation-ban.html





















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